Fernando Montes: el teatro es una experiencia

Por Manuel Estévez

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Fotografía Gina Navarro

Fernando Montes es el director de la compañía de teatro Varasanta. Actualmente está realizando el montaje Arimbato, una reflexión a los constantes casos de suicido entre los adolescentes indígenas y la interacción del diálogo de lo tradicional y lo contemporáneo de las sociedades.  La obra se presenta gratuitamente en el Jorge Eliécer Gaitán hoy 19 de octubre a las 8 pm. Montes conversó importantes puntos de la obra y su contexto con Revista Cultural Sono.

Revista Cultural Sono ¿De dónde viene la idea de hacer esta obra?

Fernando Montes Del choque que nos ha producido saber del suicidio de los jóvenes indígenas, en especial en la comunidad Embera. Nos formulamos la pregunta de por qué se están suicidando los muchachos indígenas y qué dice esto de nosotros como sociedad, como país.  Esto no se puede responder pero se convirtió en un motivo de reflexión de cómo nos vemos como país, descubrir que mucha gente ni siquiera saben que existen, todo un análisis de un fragmento del país.

RCS ¿Qué conexión tiene ustedes con la comunidad Embera?

FM Felipe, el escritor, ha tenido un contacto fuerte con la comunidad allá en el Chocó. Realmente no tenemos un contacto específico, pero como artistas tenemos contacto con el horror y hemos trabajado con varios indígenas acá en la ciudad. Lo importante es desde nuestra perspectiva como citadinos tener contacto con esta gente que lleva diez años desplazada acá. Mucha gente no sabe ni que los emberas son colombianos o que viven en casa en el centro, lugares a los que fue muy difícil acceder, es difícil establecer un diálogo con ellos.

RCS ¿Qué esperan lograr con esta obra?

FM Nosotros somos artistas, como artistas hacemos arte; esa es nuestra función y creamos la obra de teatro. La función de los políticos es resolver esos problemas. No pretendemos más que visibilizar los problemas desde una perspectiva muy importante, la de la poética, un lenguaje que toca el corazón y la mente de las personas. Lo importante es que cada quien haga su papel.

RCS ¿Qué elementos característicos trae esta obra?

FM Hay una pregunta desde lo artístico y es la de ver cómo las culturas interactúan y se retroalimentan sin destruirse. Utilizamos el colorido de las faldas tradicionales. El piso es un piso orgánico que evoca la naturaleza. Está la conjunción entre la música indígena y la música contemporánea, creada por Teto Ocampo, y que se interpreta en vivo. La dramaturgia se inspira en el pensamiento y mitología embera pero es contemporánea, algo que nos interesa mucho porque si una cultura se estanca está destinada a morir. Esa es la historia de nuestra humanidad.

RCS ¿Es la primera vez que van a presentar la obra?

FM Si es el estreno como dicen ahora “mundial” (risas). Es un premio de residencia del Jorge Eliécer Gaitán e Idartes y un premio de un fondo de apoyo a la coproducción que se llama Iberescena, es una coproducción con una compañía del Brasil, estuvimos con ellos allá y acá.

RCS ¿Dónde la vamos a poder ver?

FM En el Teatro Varsanta, luego en Brasil y esperamos volver el otro año acá, es una obra diseñada para un gran espacio.

RCS No estamos en temporada de Festival de Teatro, no hay arte y mimos por las calles ¿Cómo está el teatro local realmente?

FM Es muy curioso, nadie lo sabe; no se puede saber, los medios de comunicación desaparecieron el teatro. No existe una crítica teatral, los críticos fueron sacados de los periódicos, esa relación perversa de la crítica y el negocio es muy complicada. Hay una actividad cultural muy grande, pero el público nos e entera. Hace poco leí a Patricia Ariza diciendo que el teatro cambia a la gente y es cierto., durante mucho tiempo creí lo contario, pero creo que si cambia la realidad, cambia la perspectiva.

RCS ¿Qué mensaje da a los lectores de Revista Cultural Sono?

FM Es un montaje muy bello. Logramos hablar de la vida a través de la muerte. La fuerza de la creación en nuestro es importante como también el estar en el Jorge Eliécer Gaitán. Hay una cosa en el teatro muy bonita es que sólo se puede entender y captar en la obra como tal, no por artículos ni fotos, es una experiencia.

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