Los detalles de Estéreo Picnic

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Por Manuel Estévez

@Sonoadicto

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Estéreo Picnic ha crecido hasta ser el evento privado más importante de la música en Colombia. Estos tres días se han convertido en un referente y una marca registrada. Es el festival con mejor presupuesto de los que se realizan en Bogotá y el que más se acerca a la actualidad musical, ya que su target está principalmente dirigido al público joven, manteniendo algunos chispazos de nostalgia.

Primero es valioso reseñar que es un festival diverso que no cae en discursos de género. Fue muy enriquecedor ver a Totó, Zalama Crew y Silversun Pickups en una sólo evento. Demuestra que la música es un lenguaje amplio e incluyente que puede convivir sin problemas como viene sucediendo desde hace muchos años en el panorama mundial.

Es una plataforma interesante para artistas locales los cuales ya han ido teniendo un proceso y en este año, más que antes, fueron vistos por una cantidad decente de personas. Hubo algunas excepciones que por el clima o la hora contaron con poca asistencia, en general les fue bien en los escenarios que estuve..

Es un festival pop, es decir trae lo que suena actualmente. Y permite algunos momentos nostálgicos como Rancid, Sublime o Silversun Pickups. Pero es claro que The Weeknd, Flume o Two Door Cinema Club son artistas del momento. También tenemos música alternativa y algunos piezas diferentes como podrían ser Chancha Vía Circuito, Caribou o The XX.

En mi concepto y por cercanía disfruté más de las presentaciones de los artistas locales. Zalama Crew fue un descubrimiento, ya los conocía pero me gustó su puesta en vivo con energía y esa manera arriesgada de mezclar géneros. Seis Peatones es una de las mejores bandas de rock de Colombia, su energía y capacidad musical son tremendas. Totó la Momposina es una inmensa artista, una joya que todos los colombianos debemos admirar. Sagan y su formato en cuarteto fue sobresaliente. Lastimosamente mantengo mi deuda con Elkin Robinson en quien tenía mucho interés pero no alcancé a llegar. Entre lo internacional me gustó mucho Cage The Elephant, uno de esos descubrimientos que cada año me da el Festival.

La polémica en torno a la presentación de The Strokes es ridícula y corresponde a personas que no conocen a la banda, Colombia país godo y retrógrado. La presentación de Strokes fue irregular por la falta de oxígeno de Casablancas, no por su vocabulario o alicoramiento. Las presentaciones de artistas como The Weeknd o The XX fueron planas para mi gusto. El primero contaba con muy buenos músicos y la pantalla led daba una estética muy bonita pero fue monótono. Me quedé esperando mucho mas poder de The XX, aunque bueno pueden ser los años, la gente más joven se sintió muy bien con ellos.

El tema del clima, la distancia y la logística es complejo. Es obvio que el festival se debe hacer en esta época por su relación con Lolapallooza y el hecho de apoyarse para coordinar las giras de los artistas internacionales. Por tal razón y teniendo el precendente sería bueno que se tomaran medidas acordes a este fenómeno. El tema del barro y las improvisadas tablas en los sitios más inundados no es nada agradable cuando uno se debe desplazar entre escenario y escenario, resulta peligroso, no el romántico Woodstock que se podría pensar.

Es importante resaltar que la entrada a Bogotá por la autopista no es la mejor, es más, Bogotá, salvo la ochenta, no cuenta con entradas decentes. Por lo mismo se debería considerar este factor para replantear la llegada y salida de los asistentes al evento. El viernes salí a las dos y media de la mañana y llegué a casa a las cinco. El parque es bien lejos haciendo muy complicados el acceso y la salida.

Otra revolución que da Estéreo Picnic es el ir más allá de la música. Es un festival donde se realizan activaciones de marcas, se lanzan nuevos productos y se forma una verdadera cadena de valor en torno. Eso es bueno para la industria, habrá quienes mantengan ideales románticos sobre diferentes aspectos, pero es bueno dejar la idea de que esto no es un negocio. Por la creencia de muchos que las actividades relacionadas con música y arte son pasatiempos la cosa no ha arrancado como debiera.

Se agradece mucho que este año se hubiese incluido una zona de prensa. En la labor de periodismo muchas veces se necesita un lugar para optimizar la información, recargar equipos y descansar. También es bueno tener donde realizar entrevistas y comunicarse con el mundo exterior. Muy bien ese detalle.

En temas técnicos se vieron cosas muy bien logradas. Hubo problemas como en la presentación de Silversun Pickups, pero en general se sacó adelante con éxito el sonido, los visuales y las luces. Estos dos últimas cosas vitales para algunos como Flume, que sin ellas sería un selector normal, y de segundo plano para Sublime o Rancid, más confiados en la energía del rock & roll.

Un año más para este festival musical que contó en esta edición con el favor del público en redes sociales como nunca, tuvo una asistencia importante para los artistas locales y se enfocó principalmente en el mercado joven y el pop.

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