Por Manuel Estévez
@Sonoadicto

Nueve películas han compuesto la serie Alíen. La lucha por sobrevivir entre humanos y xenoformos, seres adaptados para sobrevivir, con ácido en vez de sangre, gran tamaño y fuerza. También está el rol maligno de la inescrupulosa compañía Weyland-Yutani que busca enriquecerse con las criaturas.
Estos xenomorfos son cazadores implacables que destruyen a todo ser viviente que tienen cerca. Se reproducen mediante embriones que parasitan a sus víctimas y las hacen estallar de forma horrible tras la incubación.
Antecedentes
Por más de una década la franquicia Alien ha vagado sin un rumbo claro. Inicia con la excepcional película de 1979, seguida por la emocionante Aliens en el 86, posteriormente estrena el oscuro debut como director de David Fincher en 1992 con Alien 3.
En 1997 aparece la irregular Alien Resurrection de Jean-Pierre Jeunot (Delicatessen, la Ciudad de los niños perdidos). Una historia con buenas escenas de acción, pero muñecos ridículos, ambiente de producción de bajo presupuesto, actuaciones raras y una Winona Ryder desperdiciada a nivel actoral y estético.
Considero que las entregas Covenant y Prometheus buscan hacer más interesante la serie pero solo terminan por enredar la historia. No es más que la existencia de un ser extraterrestre muy fuerte y con instintos reproductivos y asesinos. Del crossover con Depredador me divierte su gore serie b, en especial la segunda parte.
La historia del inicio de la saga es simple.
El escritor Dan O’Bannon trabajaba en un guión llamado Memory y posteriormente Space Beasts, inspirado en las novelas de Agatha Christie y algunas películas de ciencia ficción de los 50s. Tuvo la suerte que 20th Century Fox buscaba un proyecto sci-fi tras el éxito de Star Wars.
Tras una búsqueda se contrató a Ridley Scott, que impresionó a los productores con Los Duelistas, su debut cinematográfico. Además, su visión para Alien plasmada en los bien pensados storyboards fue definitiva.
Merryl Streep fue la primera opción para Ripley, pero acababa de perder a su pareja John Cazale y prefirieron no molestarla. La debutante protagonista Sigorney Weaver se unió al equipo junto a Tom Skerrit, John Hurt y un dubitativo Harry Dean Stanton quien estaba reacio a actuar en una película de monstruos.
Es el terror cósmico del escritor HP Lovecraft plasmado por la genialidad de los diseños del suizo Hans Giger, a quién Dan conoció durante la fallida Dune de Alejandro Jodorovsky. Su dibujo Necronom IV es escogido como el diseño para la criatura. El facehugger fue su primer diseño original para la película.
Lo primero que pensé tras ver Alien Rómulos es que ahora sé cómo se sintió el público en 1979 cuando vio la película original, traducida al español El Octavo pasajero.
El nivel de acción recuerda y rinde tributo a lo hecho por el director James Cameron (Titanic, Terminator, Avatar) en su dinámica secuela Aliens. Esta debe ser una de las mejores segundas partes de la historia.
La claustrofobia y la oscuridad son claros referentes al trabajo de David Fincher (Seven, El Club de la pelea) en Alien 3, la película donde empezó a bajar la calidad pero posee un suspenso magnífico. Fincher siempre ha renegado de este trabajo y acusa a Fox de su fracaso.
Se le agradece al equipo de Rómulos por tratar de arreglar hasta donde fue posible el desconcierto que supuso Alien Resurrection.
La pelicula
Una nave de transporte minero lleva su carga de vuelta con una reducida tripulación. Cinco jóvenes y atléticos humanos, más el androide Andy, llegan a la estacion espacial y centro de investigación Romulus. Ahi se topan con un panorama desolado y tenebroso. Esta es una instalación de la compañía Weyland-Yutani, así que ya se sabe con qué están experimentando.
La oscura y sintética fotografía está a cargo del camarógrafo y cinematografo mexicano Galo Olivares. El músico y conductor de orquesta Benjamin Wallfisch se basa en el trabajo original de Jerry Goldsmith, pero cambia el sonido de cuerdas por sintetizadores y pianos.
La creación
Fede Álvarez, director y escritor uruguayo, reconocido por sus dos películas de Breath y el muy digno remake de Evil Dead, se pone al frente de esta producción. Resulta evidente que él y su socio creativo Rodo Sayagues estudiaron juiciosamente las películas de Alien para escribir el guión.
Esta dupla logra un trabajo mucho más que decente y posiblemente supera las expectativas de los fans. Rómulos, no solo se apega a los cánones de la franquicia original sino que además es una buena película.
Cailee Speany se calza los grandes pantalones cargo de Sigorney Weaver. Rain es una heroína de acción a la altura de la teniente Ripley. Ya había dado magníficas interpretaciones en Priscila y Civil War.
Spaeny sorprende ya que al contrario de la actriz original es una mujer menuda y bajita. Las demás actuaciones están bien, pero se entiende que son personajes descartables. Quizás David Jonsson (Andy) tiene un papel más notorio pero su trabajo es irregular por detalles del guión.
Se evidencia la mentoría que hace Ridley Scott (productor) a Álvarez. Romulus posee un toque vintage, participan personajes de la primera película y simplifica la marejada de sucesos de las dos entregas anteriores. Es un buen conector de todos los títulos.
El ritmo narrativo mantiene el suspenso en todo momento. Sobreemplea el jumpscare, eso sí que se siente raro en una película de Alien. Esta es una historia escalofriante y angustiosa.
Aporte de la saga a la cultura pop
En 1979, la gente recién había visto Star Wars y tenía una visión heroica y aventurera del espacio y Scott lo convertía en una pesadilla sangrienta e instintiva.
Alien continuó un legado importante que fue copiado en muchas producciones de bajo y mediano presupuesto. Creepozoides (1987), Xtro (1982), o la italiana Alien 2 (1980), son algunas de las más horrendas fotocopias de la saga.
Recordé la escena de Space Balls (Mel Brooks, 1987) en la que un títere mal hecho de un xenomorfo sale de las entrañas de John Hurt cantando: Hello my Honey. Hello my baby. A lo que Hurt responde: Oh no. Not again.
Conclusiones
Alien: Rómulus es en mi concepto una sorpresa positiva. Tiene nostalgia sin depender ella. Regresa a los animatrónicos y efectos prácticos. Efectos visuales muy bien logrados. El nacimiento una nueva heroína de acción. Muy buenas escenas de acción. Una narración suficientemente bien estructurada para no perder el hilo en ningún momento. Un punto sólido tras mucha confusión narrativa en las últimas entregas.
En contra tiene lo reiterativo de la estructura narrativa con las películas previas. Momentos de vacío argumental en que los xenomorfos aparecen y desaparecen a favor del guión. Un elenco joven y no tan conocido que se sabe cómo va a acabar desde el inicio, ni llegamos a lamentar sus muertes. El androide que tarda en reiniciar lo que la narrativa demanda.
No deje de verla a partir de agosto 15 en salas de cine en Colombia.
