Por Manuel Estévez
35 películas. El Universo Cinematografico Marvel continúa creciendo. Capitán América: un nuevo mundo es la primera de tres producciones que nos van a presentar este año.
Es la continuación de la serie El halcón y el soldado de invierno, tiene elementos del génesis del UCM de las primeras películas de Hulk (2003) y funciona como introducción para los próximos Vengadores. Está enmarcada dentro de la acción, la trama política y el conflicto personal.
De qué se trata
Sam Wilson (Anthony Mackie) acarrea de la manera más digna que puede el hecho de ser el nuevo Capitán América tras la dimisión de Steven Rogers.
Se ha acercado al nuevo presidente de Estados Unidos, el viejo conocido general Thadeus Ross (Harrison Ford). Ross busca la redención para volver a ganar el afecto de su hija Betty (Liv Tyler), exnovia del científico Bruce Banner, hombre a quien el general persiguió por convertirse en Hulk tras un accidente en el laboratorio.
Se ha propuesto entrenar a Joaquín Torres (Danny Hernández) como el nuevo héroe Halcón y limpiar el nombre de Isaiah Bradley (Carl Lumbly), el súper soldado negro injustamente olvidado que conocimos en el Halcón y el Soldado de invierno.

El elenco
Vemos a un Harrison Ford bastante mayor en una actuación convincente, aunque temí por la integridad del actor en cada rabieta que tuvo.
Anthony Mackie da un desarrollo correcto a su personaje. Navega entre la confianza absoluta del principio y las posteriores dudas sobre su capacidad resolutiva y estar a la altura de su cargo.
Danny Hernández es el alivio cómico y construye un personaje que llega a ser irritante en medio de su deseo de ayudar al Capital América.
Shira Haas interpreta a Ruth Bat-Seraph, una antigua viuda negra quien ahora es la jefe de seguridad del presidente. Gracias a su entrenamiento es un experta en pelea en un diminuto y frágil cuerpo.
Giancarlo Esposito debe huir de ese papel ‘villano de Breaking Bad’ en que lo han encasillado. Es hora que reniegue de ser el malo latino o espacial que a sus 60 años domina todas las técnicas mortales y un español machucado.
La historia
Tiene buenas coreografias de pelea y es rescatable que el protagonista no tenga poderes, aunque parece que los tuviera. Me parece más una pelicula de acción que una intriga política de ciencia ficción como fue la magnífica el Soldado de invierno (2014).
Las batallas principales están bien desarrolladas especialmente la aerea, en un guiño que me recordó mucho a Superman (1979). La esperada pelea con Red Hulk no ofrece más de lo que se puede esperar.

El guión tiende a desdibujarse fácilmente. Se nota que mucha gente le metió mano. Por momentos deja de ser creíble y son la casualidad y el fan service los que reconectan la historia.
Los puntos de giro sorprenden inicialmente pero luego se pierden. El misterioso villano se diluye entre lo increíble y la casualidad.
El director
Está dirigida por el nigeriano Julius Onah (1983 – ). Onah estudió cine en Estados Unidos. Debutó con The Girl is in Trouble (2015). apadrinado y producido por Spike Lee.
En 2016 dirigió Cloverfield Paradox. Posteriormente Luce, protagonizada por Naomi Watts y Octavia Spencer.
Se nota que quiso saludar a Lee en este trabajo por el énfasis que hace de la cultura callejera. Su intención se queda en el estereotipo de los afros y latinos en un mundo de blancos.

Puntos en contra
Está provista de un humor lleno de referencias testosterónicas a las series ochenteras de policías que la verdad no ayuda a que los diálogos fluyan de manera más suelta.
El punto más negativo radica en su exagerado dramatismo. Largas escenas de amistad, demostraciones de cariño, autosuperación y sentimentalismo que alargan el metraje de una manera innecesaria.
Se da la aparición de un personaje entrañable que por un instante nos hace creer que va a entrar en acción pero «tiene que tomar un vuelo».
En conclusión
Capitán America: un mundo nuevo es una película entretenida, lo sería más sin tanta escena sentimental. Se deja ver y entendemos que es un paso a otro fascículo de esta inmensa serie llamada UCM.
Si bien los personajes podrían ser más profundos no está mal actuada y Anthony Mackie luce como el reemplazo del alicaido Will Smith. Las referencias al barrio, a los chicos pobres conociendo gente blanca con plata, el hiphop y el soul no son interesantes.
Es una película de transición. Pudo ser un cierre mucho más sólido al designio de Sam como el Capi. Si la idea es desconectarse un rato con una película de acción con trama politica está bien.
Si ud desea elaborar, comparar con historietas y hallar la profundidad del universo pos no
Estreno febrero 13 en Colombia.
