Por Redacción Sono

«Tenemos la responsabilidad de hacer documentales desde nuestro propio punto de vista y contar nuestra propia historia.»

Jihan El Tahri es una realizadora documental, escritora y periodista originaria de Egipto residente actualmente entre Europa y África.

La avalan una carrera en el cine de más de tres décadas, trabajar como corresponsal del Washington post, Reuters y The Sunday Times, entre otros, y un deseo investigativo permanente que le ha valido varios exilios. Es una mujer culta, políglota, amable y poseedora de una inteligencia aguda.

Este 2025 visita Colombia invitada como tallerista por la Muestra Itinerante de Cine Africano. Sus documentales han tratado todo todo tipo de temas enfocados en la realidad africana. A lo largo de su vida ha visitado muchos lugares del mundo y se ha nutrido intelectualmente en cada uno.

Se ha vinculado con diferentes organizaciones culturales. Cuenta con una filmografía superior a los 20 títulos.

La acompañamos a tomar un café en su visita a Bogotá.

Has tratado una infinidad de temas relacionados con la salud pública, con el feminismo, muchas cosas. ¿Cómo sabes hacia qué proyecto vas a apuntar cada vez?

Mi interés radica principalmente en tratar de entender qué pasó con la visión de futuro. Después de las independencias, después del colonialismo, había una visión de futuro. Todo lo que hago es intentar comprender por qué no funcionó. Así que me concentro en qué pasó con el movimiento de solidaridad, qué pasó con el movimiento panafricano, qué pasó con las alianzas entre diferentes movimientos de liberación.

El feminismo como concepto me parece muy interesante. Pero yo no me llamaría feminista como tal. Creo que soy feminismo. No quiero ser feminista porque lo que hago como mujer es lo que tengo que hacer. Y yo soy como cualquier otro hombre, como cualquier otro ser humano. ¿Y cómo conseguimos vernos todos como iguales? Eso es lo que me gustaría.

Interactúas con musulmanes y en nuestros países hay la creencia que son malos con las mujeres. ¿Cómo es su experiencia como mujer?

No soy una musulmana muy practicante, pero soy musulmana sin ninguna duda. Creo que la imagen que se da del Islam es errónea porque, al fin y al cabo, la primera mujer al mando de un ejército fue la esposa del profeta.

Creo que se ha confundido mucho la tradición con el Islam como religión. Y yo personalmente creo que es una religión de paz. Es una religión que trata de encontrar a los suyos.

Solían enterrar vivas a las niñas antes de la llegada del Islam. Así que no creo que el Islam como religión esté en contra de las mujeres. Pero la tradición y el conservadurismo han puesto todos los obstáculos en contra de las mujeres. Prefiero creer en la religión que en cómo se ha traducido la religión.

Hay un debate sobre el papel del documentalista y el punto de vista que le puede dar, alterando el resultado.

Decir que son objetivos al hacer una película es mentir. No hay objetividad. Porque cuando hago una película, elijo quién habla. Elijo cuánto tiempo hablan. Elijo lo que dicen cuando estoy editando. Lo que transmito es cómo veo el mundo. Y creo que es muy importante que un cineasta reconozca que está transmitiendo su historia de la manera en que ve esa historia y cinco de nosotros podemos hacer la misma película y será desde un punto de vista diferente.

Mi elección es que yo veo el mundo desde un punto de vista sureño. Soy del sur. Creo en el sur global. Y creo que tenemos que empezar a contar nuestras historias desde ese punto de vista.

¿Qué relación tiene una mujer como tú con la Academia de los Oscar?

Fui nominada para ser miembro de la Academia varias veces. En la fase de selección llegamos a ver todas las películas de la selección antes de la lista de finalistas, antes de la nominación y antes de mejor película.

Así, por ejemplo, el año pasado vi una película de Guatemala. Nunca la vería en ningún otro sitio. ¿Cómo iba a tener acceso a esa película? Así que creo que es un espacio importante.

¿Cómo han afectado al documental todos estos formatos nuevos, TikTok, Instagram, que todo va súper corto, la capacidad del público para captar los mensajes de los documentales y de películas un poco más densas?

El documental es lo que dejamos para el futuro, la ficción puede ser desechada. El documental es lo que le decimos a las generaciones venideras lo que somos.

Tenemos la responsabilidad de hacer documentales desde nuestro propio punto de vista y contar nuestra propia historia.