Por Manuel Estévez

Fui un niño nerd en los 80 veíamos Cosmos con Carl Sagan en familia, esperaba con ansia Naturalia y pasaba las tardes en la biblioteca del colegio investigando sobre animales.

Tras el éxito de Starwars, la cultura pop gradualmente fue acogiendo a la ciencia ficción como entretenimiento familiar. Spielberg presentó películas como la oscura Encuentros cercanos del tercer tipo o la lacrimógena E.T. La serie Alf nos permitió vivir con un extraterrestre y Fuera de este mundo, soñar con ser un híbrido poderoso con la capacidad de detener el tiempo.

Elio es una película diseñada para estos niños nerd de los 80. Posee un contenido profundo en cuanto a pérdidas, conflictos y sentido de ubicación en el mundo.

La película

Elio (Yonas Kibreab) ha perdido a sus padres y está decidido a abandonar este planeta para ir a un lugar donde pueda estar mejor. Su tía Olga (Zoey Saldana) tiene su tutoría y apenas da abasto con el excéntrico niño y sus obsesiones y fantasías con viajes espaciales.

La joven hace su mejor esfuerzo para tratar de comprenderlo y al mismo tiempo se niega a tener la vida que ha deseado por la responsabilidad que siente con su sobrino.

La historia nos sumerge en temas sensibles como las ausencias y cómo los niños y las personas en general las manejamos. La negación, la evasión y otras tácticas son empleadas comúnmente para reemplazar a una persona que ya no está. Dicha evasión se hace permanente y Elio nos cuestiona si se pueden dejar atrás los problemas cuando somos nosotros mismos quienes los acarreamos.

Reflexiona de una manera muy poética sobre el concepto de familia y de pertenencia. Reverencia y referencia a los mensajes extraterrestres musicales de Encuentros cercanos del tercer tipo, a los visitantes curiosos científicos de ET, Se toma la licencia de llamar a un personaje como el planeta originario de Alf, de cierta manera homenajea al personaje de Will Smith en el Día de la independencia y nos presenta un tipo de niño en vía de extinción.

Audiovisual

Técnicamente está muy bien lograda. Animación brillante, funcional y colorida. No tengo ninguna duda en que es la mejor película infantil que he visto este año.

Los seres extraterrestres son maravillosamente diferentes y pensados. Además de las texturas y sorpresas que nos ofrecen.

El apartado musical nos presenta a los geniales Talking Heads con su icónica canción Once In A Lifetime, un llamado a preguntarnos cómo hemos llegado a ocupar el sitio que tenemos en este mundo. Para los créditos finales el talentoso dúo argentino Miranda presenta Quiero ser tu amigo, una canción inédita que le da mucha onda latina a la parte final.

El director

Animador, guionista y codirector de Coco, Adrián Molina debuta positivamente a sus 40 años como director. Se le nota el oficio y logra un trabajo muy correcto dada la orientación de sus trabajos anteriores en Toy Story y Monsters inc. Conduce muy bien momentos de ternura, otros humorísticos inesperados y cierra de una manera muy emotiva la historia.

En conclusión

Elio es una historia íntima que no menosprecia el mundo infantil, no cuenta sus dudas, miedos, incertidumbres o debilidades. Es un análisis de cómo se constituye una familia y el equilibrio que podemos lograr si escuchamos a nuestros hijos y les permitimos ser.

También funciona como llamado de atención a explotar el potencial, la creatividad inmensa y la capacidad de asombro que nos pueden brindar cuando les damos las herramientas correctas y no simplemente los criamos de manera despreocupada.

En salas de cine colombianas actualmente.