Por Manuel Estévez

La actriz Dolores Fonzi nos presenta la película Belén, su segunda película como directora. Adapta el libro Somos Belén de Ana Correa. Este texto denuncia el caso real de la criminalización de un aborto espontáneo en Tucuman (Argentina).

La criminalización del dolor

Este drama político y judicial nos cuenta la historia de Julieta. Una joven veinteañera llega a la sala de urgencias con dolor de estómago.

Más tarde, la policía encuentra el cuerpo de un feto en el baño y Julieta es encarcelada por homicidio sin pruebas claras ni un juicio equilibrado. Ella clamaba que ignoraba su estado de embarazo.

Película feminista argentina propuesta para los Premios Oscar. ‘Belén‘ fue el nombre que la jurista Soledad Deza (Dolores Fonzi), lideresa de un grupo feminista, le dio a Julieta para proteger su identidad luego de que su aborto espontáneo fuera criminalizado.

Su colectivo incluye activistas y abogadas que buscan la libertad de Julieta tras dos años de que la joven es encarcelada.

Además de débiles pruebas, declaraciones contradictorias e inconsistencias, de denota una clara intención política en cerrar el caso y evitar investigaciones a profundidad.

Soledad y sus colaboradoras empiezan a trabajar. Se encuentran con numerosos obstáculos, muchos generados por otras mujeres. Los medios de comunicación les cierran las puertas y los expedientes se hacen inaccesibles.

Una película necesaria para entender el presente

La Noche de los lápices, La Historia oficial o El Secreto de sus ojos, son recordadas y premiadas producciones argentinas donde está el elemento judicial y la corrupción de raíz. Belén es una historia sobre la lucha feminista y el malestar que causa en el poder.

Estas mujeres son víctimas de estigmatización, burlas y amenazas por querer hacer valer sus derechos sexuales y reproductivos.

Si bien el caso sucede en Argentina, se hace universal por los alcances culturales y sociales que la visión patriarcal puede tener.

Dolores Fonzi detrás de cámara

En sí es una película sencilla que narra cronológicamente la historia. La historia acontece en 2016. Fue importante para sentar un precedente y ser importante para las leyes de legalización del aborto cinco años más tarde.

Ha hecho un recorrido de festivales donde ha cosechado premios y reconocimientos. Un debut interesante para la actriz y guionista.

Fonzi reúne a un potente equipo para la película. Marilina Bertoldi en la música original, Micaela Saiegh en dirección artística, Laura Paredes, Agustina San Martín y Nicolás Britos como coguionistas.

Además de ella misma, Paredes, Camila Plaate y Julieta Cardinali, en los papeles principales.

Es la visión femenina sobre un tema femenino. Por momentos cae en apasionamientos. Eficazmente logra sintetizar la incomodidad que está lucha genera en el poder y las consecuencias para estas mujeres.