Canserbero, rapero con conciencia interior.

Por Manuel Estévez

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Fotografía Gina Navarro

El MC (Maestro de ceremonias, denominación del argot rapero al cantante) venezolano Canserbero era una de las grandes apuestas internacionales para Hip Hop al Parque 2012 y pagó con creces esa expectativa. Su presentación estuvo llena de los elementos que mueven al Rap como una manifestación de sentir colectivo y personal. En sus canciones narra con propiedad y un profundo sentido estético experiencias personales, transferibles a cualquier otro ser humano. Decepciones amorosas, pérdidas, hallazgos de la vida, esperanzas, todo en una línea repleta de frases profundas y ciertas, así se desenvuelve Canserbero, que afirma que para componer hay que leer mucho y para ser un buen MC hay que practicar. Sus letras logran llegar y tocar a la audiencia, porque tiene el poder de ser concreto y directo. Es un respetuoso de la canción como pieza unitaria y no como un pedazo sin forma de algo.

Su postura política no es tan evidente en sus letras, que más bien buscan conciencia a todo nivel de los actos que hacemos y la forma como nos proyectamos. En su rueda de prensa habló de Hugo Chávez y dijo que era una buena idea pero con una aplicación discutible y reiteró que en la educación está el cambio que nuestros países necesitan. Por cierto una exageradamente política rueda de prensa que este abogado de 24 años sorteó con bastante acierto. No ocultó su posición a favor del socialismo, pero resaltó que para su aplicación es necesario educar al pueblo y ese factor puede hacer que no funcione tan bien en países como el nuestro.

Además de lo que representa, es un artista musicalmente eficaz, con un sentido impecable de la métrica, que a voluntad es capaz de improvisar palabras como si fuera una ametralladora. Es un tipo joven, del cual espero saber más y que seguramente seguirá creciendo con un claro ideal. Manifestó que no le molestaría firmar con un sello grande, siempre y cuando esto no le obligue a cambiar su esencia como artista. Habla todo el tiempo de la bipolaridad, de ser un perro de dos cabezas y de ser al mismo tiempo un humano con un animal furioso dentro que busca salir. Definitivamente uno de los mejores artistas extranjeros de este año en Bogotá.

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